Korina es una perra American Staffordshire terrier de 4 años que hemos estado preparando para que pueda intervenir en las terapias de estimulación cognitiva y psicomotricidad. A pesar de que esta raza puede parecer que no es adecuada para este tipo de tareas, en el caso concreto de Korina ha resultado ser una gran colaboradora. Sus aptitudes son perfectas para trabajar con todo tipo de personas.
En realidad no es tan excepcional, ya que en otros países como Estados Unidos es bastante habitual el uso de estas razas en tareas de asistencia a personas discapacitadas, ancianos, niños,…
Korina ha realizado parte de su adiestramiento y sus primeras sesiones en la Residencia Ca n’Amell, centro colaborador de Dependentia, situado en Premià de Mar.
En realidad no es tan excepcional, ya que en otros países como Estados Unidos es bastante habitual el uso de estas razas en tareas de asistencia a personas discapacitadas, ancianos, niños,…
Korina ha realizado parte de su adiestramiento y sus primeras sesiones en la Residencia Ca n’Amell, centro colaborador de Dependentia, situado en Premià de Mar.
Como la TAAC (terapia asistida por animales de compañía) era una actividad nueva en Ca n’Amell quisimos tomar registros de los resultados que obteníamos mientras realizábamos las sesiones de estimulación con Korina para compararlos con los resultados de otras sesiones donde realizábamos los mismos ejercicios, pero sin la intervención de Korina. Las sesiones estuvieron divididas en dos partes, una orientada a la estimulación del lenguaje, la orientación, la memoria y la atención, y otra dirigida a la estimulación de la psicomotricidad. Para ello, diseñamos una serie de ejercicios orientados a estimular las áreas descritas.
Nuestra hipótesis inicial era que gracias a la intervención de Korina la terapia de estimulación cognitiva sería más efectiva, así que nos decidimos a tomar registros de las actividades para luego hacer un análisis comparativo. Para ello utilizamos el estadístico t de Student con un nivel de confianza del 90% y un error del 0,1. Los resultados fueron muy positivos y mostraron una diferencia positiva significativa en las siguientes áreas:
- Capacidad nmésica (memoria). En todas las sesiones que intervino Korina después de presentarla a los usuarios y dejar que la saludaran acariciándola se les contó una historia en la que ella era la protagonista. El resultado fue que acertaron más del doble de respuestas cuando se les preguntaba sobre la historia en la que intervenía Korina que cuando se les contaba la misma historia, pero el protagonista en vez de ser Korina era una persona que estaba presente y que también conocían. Además algunos usuarios, en ocasiones, nombraban a Korina por su nombre de forma espontánea cosa que no hacían entre ellos o con los profesionales del centro. También lograban recordar nombre de la perra con más facilidad que el de la profesional del centro que participaba en la TAAC y con la que trataban a diario desde hacía varios meses.
- Atención. En general durante todos los ejercicios los participantes se mostraron más atentos cuando trabajaban con Korina especialmente durante los ejercicios orientados a la estimulación de la psicomotricidad donde interaccionaban con ella de manera directa sosteniendo un aro para que lo atravesase, cepillándola o anudando y desanudando un pañuelo en su cuello.
- Respuesta emocional (alegría y actitud).Obtuvimos el triple de registros de las veces que los participantes sonreían o se reían cuando intervenía Korina que cuando no lo hacía.
- Respuesta social (relación social). En esta variable observamos un leve aumento positivo de las interacciones intragrupales cuando intervino Korina. También observamos aumento en las relaciones sociales fuera de la TAAC tanto entre los participantes de las sesiones de estimulación como de otros usuarios de la residencia que no participaron, pero que encontraron en ella un motivo de conversación.
- Respuesta física (motricidad fina y gruesa). A nivel cuantitativo registramos un leve aumento de las veces que los participantes completaban una acción cuando interaccionaban con Korina. A nivel cualitativo podemos afirmar que se esforzaron mucho más y pusieron más atención y empeño cuando dirigían las acciones hacia cubrir una necesidad de Korina. Pudimos observar como algunos usuarios que permanecen en silla de ruedas y su actividad motriz de las extremidades superiores y del tronco es prácticamente nula a lo largo del día, se incorporaban moviendo el tronco y utilizaban con empeño los brazos y las manos para realizar los ejercicios.
- Motivación. Observamos un aumento significativo de la motivación durante las sesiones de TAAC, en este apartado cabría destacar que los usuarios que participaron en el estudio en muchas de las ocasiones que se encontraban por el centro residencial con el profesional que dirigía a Korina durante las sesiones de TAAC le preguntaron acerca de las actividades y le pidieron que les avisase cuando hubiese alguna actividad con ella, lo que nos sirvió para ver que su participación en las sesiones de TAAC era un nuevo estímulo que esperaban con ilusión. Además durante las conversaciones informales fuera de las terapias de estimulación vimos como los participantes se esforzaban utilizando la orientación temporal y espacial (áreas notablemente afectadas) ya que en varias ocasiones fueron capaces de orientar la terapia en el tiempo y lugar donde se realizaban, cosa que no es frecuente que suceda con otras actividades.
- Esfuerzo. En esta variable también registramos una diferencia significativa cuando los participantes interaccionaban con Korina. La mayoría de ellos reportaron que les gustaba hacer cosas para la perra como ponerle un pañuelo, acariciarla o cepillarla. Estas acciones hicieron que los participantes se sintieran útiles haciendo algo para Korina lo cual actuó en si mismo como un reforzador positivo y potenciador del nivel de esfuerzo de los participantes.
La TAAC resultó ser un poderoso estímulo que hacía que los usuarios esperasen la actividad expectantes ya que a medida que avanzaron las sesiones fueron estrechando en vínculo afectivo tanto entre los participantes como con Korina. Esta actuó de catalizador social para el grupo que intervino en el estudio y para otros usuarios que aunque no intervenían directamente, se acercaban a preguntar o a observar. La TAAC resulto ser una forma efectiva de estimulación cognitiva y un potenciador de la salud emocional y el funcionamiento social en la residencia ya que promovió relaciones y sentimientos positivos muy beneficiosos.
Manuel Balibrea
Equipo de Dependentia