Todo el mundo necesita a veces un poco de ayuda adicional. Para las personas dependientes, sin embargo, esa asistencia es esencial para mantenerse seguros y sanos en la comodidad de su propio hogar. Los servicios a domicilio permiten a las personas que lo requieren seguir siendo independientes sin dejar de recibir la ayuda para satisfacer sus necesidades específicas. Tanto si se trata de actividades cotidianas -como cocinar, limpiar, bañarse, vestirse y asearse-, como necesidades médicas más complejas, como la administración de medicamentos o el cuidado de heridas.
Además, la asistencia a domicilio también ofrece compañía a las personas dependientes que no tienen cerca a familiares o amigos que puedan visitarlas con regularidad. Tener contacto regular con alguien ajeno a su hogar puede suponer una gran diferencia en la calidad de vida de las personas que viven de forma independiente y contribuye a que nadie se sienta aislado o solo.
Garantizar una atención de calidad
Lo más importante de los servicios a domicilio es garantizar una atención de calidad a todas las personas dependientes que la reciben. Todos los auxiliares sanitarios a domicilio deben estar certificados y recibir una formación exhaustiva antes de trabajar con cualquier usuario individual. Deben seguir también las mejores prácticas a la hora de atender a las personas y adherirse a las directrices de seguridad para minimizar los riesgos, al tiempo que proporcionan el mayor nivel de atención posible.
Los auxiliares sanitarios a domicilio también deben conocer las distintas afecciones y tratamientos médicos para poder reconocer cualquier cambio en el estado del paciente que pueda requerir atención adicional por parte de un médico u otro profesional sanitario. También es importante que los asistentes sanitarios a domicilio establezcan relaciones positivas con las personas cuidadas para que se sientan cómodas, comunicándoles abiertamente cualquier preocupación o problema que surja durante el curso de los cuidados.
En Dependentia lo sabemos y velamos por ofrecer unos servicios a domicilio de calidad con profesionales formados y preparados.
Una ayuda inestimable
Los servicios de atención a domicilio son un recurso inestimable para las personas dependientes que buscan ayuda para las tareas cotidianas o las necesidades médicas sin dejar de mantener su independencia y su calidad de vida en casa. Garantizar una atención de calidad es primordial para que, con el apoyo adecuado, las personas dependientes puedan recibir la ayuda que necesitan sin dejar de vivir con seguridad y comodidad en sus propios hogares.
Además, la asistencia profesional a domicilio es también un recurso muy óptimo en el caso de que el cuidado de la persona dependiente recaiga de manera mayoritaria en un familiar. Una ayuda extra de confianza y de calidad permitirá que el cuidador voluntario habitual pueda tener periodos de descanso sin preocuparse de si su familiar está recibiendo o no la atención que necesita, porque estará garantizada. Los descansos, aunque sean cortos, son indispensables para que el cuidador habitual no sufra el síndrome de burn out, o sea, de sentirse quemado.