¿Problemas de circulación? ¿Artrosis? ¿Retención de líquidos? Un buen masaje drenante puede ser la solución a estas molestias, siempre que se haga suave y a manos de profesionales.

Los masajes drenantes se realizan con el objetivo de eliminar las toxinas y los deshechos acumulados por el cuerpo. Se drenan los líquidos sobrantes en el organismo y se facilita su evacuación.
Y es que, por ejemplo, la acumulación de líquidos en las piernas, muy habitual en la edad adulta, afecta al sistema circulatorio y a la salud en general. Por eso, aparecen, entre otros, problemas de varices o edemas y, con ellos, la sensación de pesadez en las piernas o dolor.
Por todo ello, el drenaje linfático es una técnica manual que se recomienda a pacientes con retención de líquidos, tendencia a la inflamación, enfermedades articulares o reumáticas como la artrosis e, incluso, problemas de circulación.
¿Quién realiza los masajes drenantes?
Es muy importante que este tipo de masajes se lleve a cabo por profesionales, sobre todo cuando se realizan a personas mayores. Una mala aplicación podría ocasionar nuevos problemas de salud o molestias en este tipo de personas.
Es decir, el drenaje linfático o masaje drenante se debe aplicar por parte de un fisioterapeuta que ayude a activar la circulación linfática. Es el profesional adecuado para obtener los mejores resultados.
Para ello, realiza una serie de movimientos circulares, repetitivos y de bombeo con sus manos para poder empujar la linfa en dirección a los ganglios necesarios para que se drene.
Este tipo de masaje debe realizarse siempre de manera suave: si se ejerce un ritmo o una presión mayor a la que corresponde, puede hacer que los vasos linfáticos se bloqueen y se consiga el efecto contrario al deseado. Nunca debe ejercerse ningún tipo de fuerza en la zona que se desea tratar.
Dependiendo de las personas y sus hábitos diarios, de su genética y de la cantidad de zonas del cuerpo que hay que tratar, el fisioterapeuta puede recomendar hasta dos masajes drenantes por semana. Según se vayan obteniendo resultados, esta frecuencia ya va disminuyendo.
Beneficios del masaje drenante
Algunas de las principales ventajas de aplicar un masaje drenante en personas mayores son que:
- Reduce la inflamación
- Reduce los edemas o la hinchazón de zonas concretas, como las piernas
- Mejora el sistema inmune y las defensas del organismo
- Tiene un efecto calmante sobre el dolor
- Elimina los deshechos del cuerpo
- Mejora el sistema circulatorio
- Reduce la presión sanguínea
- Previene las varices
- Estimula el sistema urinario
- Actúa como terapia antiestrés
- Ayuda a ganar calidad de vida
- Mejora el estado de ánimo
Cómo realizar un masaje drenante
Uno de los aspectos más importantes que hay que tener en cuenta a la hora de realizar un masaje drenante es su ritmo y presión. Este tipo de masaje manual requiere movimientos lentos y suaves, que, además de eliminar líquidos, proporcionan una sensación muy agradable de relajación.
El fisioterapeuta estimula, de forma manual, cada punto del cuerpo que toque, siempre siguiendo el sentido de los ganglios linfáticos. Además, existen una serie de movimientos (circulares, de bombeo…) ya pautados que sirven para obtener todos los beneficios mencionados.
Además, con el objetivo de facilitar el drenaje y conseguir el éxito del tratamiento se recomienda, tras las sesiones, intensificar la hidratación y evitar el consumo de azúcar y de alcohol.
Dentro del amplio catálogo de servicios que pone a disposición de las personas mayores y/o dependientes, Atlàntida Dependencia ofrece visitas domiciliarias y tratamientos de rehabilitación y estimulación a cargo de expertos en fisioterapia. Este servicio forma parte del compromiso del Grupo por atender y cuidar de las personas que lo necesitan, facilitando su autonomía.